La IA agéntica se refiere a sistemas de inteligencia artificial diseñados para actuar con autonomía, propósito e iniciativa. A diferencia de la IA tradicional, que sigue instrucciones predefinidas y limitadas, la IA agéntica puede tomar decisiones, actuar y adaptarse en función de los objetivos, el contexto y la información en tiempo real. Estos sistemas funcionan más como “agentes” que como herramientas; es decir, no solo responden a lo que reciben, sino que gestionan las tareas de forma proactiva, resuelven problemas y alcanzan objetivos en nombre de los usuarios.
En el ámbito empresarial, la IA agéntica puede automatizar flujos de trabajo complejos, coordinar sistemas y gestionar de forma independiente procesos de varios pasos. Por ejemplo, una IA agéntica podría asistir a un cliente recopilando datos, haciendo recomendaciones y ejecutando acciones como reservar citas o resolver problemas, todo ello sin necesidad de supervisión humana constante.
Con este nivel de autonomía, las organizaciones pueden escalar sus operaciones, mejorar la productividad y ofrecer experiencias más rápidas y personalizadas. La constante evolución de la IA agéntica abre las puertas a una nueva forma de trabajo, en la que ya no se trata solamente de una simple automatización, sino de una colaboración inteligente entre humanos y máquinas.
“La verdadera IA agéntica representa un cambio en el funcionamiento de la inteligencia artificial. Ya no solo ejecuta tareas, sino que comienza a razonar, adaptarse y actuar de manera autónoma dentro de las limitaciones éticas y operativas que la organización define”.
Glenn Nethercutt, director de Tecnología de Genesys
IA agéntica para grandes empresas
La IA agéntica es una forma de inteligencia artificial diseñada para operar con autonomía, propósito y capacidad de toma de decisiones. A diferencia de la IA tradicional, que requiere instrucciones específicas para cada tarea, la IA agéntica puede establecer objetivos, planificar acciones, adaptarse a condiciones cambiantes y ejecutar flujos de trabajo complejos sin intervención humana constante.
La IA agéntica representa un cambio para las grandes empresas, que pasan de la automatización básica a sistemas inteligentes que actúan más como compañeros de trabajo digitales. Estos agentes de IA pueden iniciar tareas, coordinar entre departamentos o plataformas y optimizar continuamente los resultados basándose en datos en tiempo real. Por ejemplo, en un contact center, la IA agéntica podría gestionar una interacción completa con el cliente, desde la identificación del problema y la recuperación de los datos pertinentes hasta la resolución de la solicitud y la actualización de registros, y todo sin intervención manual.
Este nivel de inteligencia y autonomía permite escalar operaciones, reducir costos y mejorar la calidad del servicio en todas las regiones y unidades de negocio. La IA agéntica también optimiza la toma de decisiones, acelera los tiempos de respuesta y da mayor uniformidad. La creciente complejidad y demanda propias de las grandes empresas representa una excelente oportunidad para el uso de la IA agéntica, que brinda más agilidad y eficiencia y mantiene altos estándares de experiencia del cliente y cumplimiento regulatorio.