El análisis predictivo utiliza modelos estadísticos y aprendizaje automático para examinar datos históricos y prever resultados futuros. Las empresas hacen uso del análisis predictivo para identificar tendencias, anticipar los comportamientos de los clientes y optimizar sus recursos. En cuanto a la experiencia del cliente, puede predecir la posible pérdida de clientes, prever el volumen de llamadas o establecer la vía probable para resolver problemas específicos. Las organizaciones pueden intervenir de manera proactiva; por ejemplo, ofreciendo promociones especiales o asignando personal a los centros de contacto para hacer frente a los períodos de máxima demanda. El ajuste continuo del modelo es esencial para mantener el nivel de precisión a medida que van cambiando las condiciones y las preferencias del consumidor.